Testimoni 12
"La importancia del estudio, de la comprensión, de la innovación, del diálogo y la confrontación con la cultura como elemento de purificación. Esto es lo que puedes encontrar en el ISCREB, y también lo que aporto yo como profesor."
"La importancia del estudio, de la comprensión, de la innovación, del diálogo y la confrontación con la cultura como elemento de purificación. Esto es lo que puedes encontrar en el ISCREB, y también lo que aporto yo como profesor."
"Lo mejor de este centro son las personas, los profesores son muy competentes. Existe un muy buen ambiente entre los alumnos. Estudiar en el ISCREB es una de las opciones vitales de las que estoy más satisfecho."
"El ISCREB ha sido una decisión muy acertada, estudiar aquí, en un lugar que potencia el pensamiento libre, crítico, y con discernimineto, todo esto basado en una Teología actual, me ha abierto la mentalidad, y lo que es aún más importante: el corazón."
"La formación que se ofrece es excelente, así como la posibilidad de estudiar en línea. El nivel de implicación del profesorado es muy alto, y los conocimientos, y el material facilitado son de mucha ayuda. Un gran centro de formación, que está al día, y con una propuesta actualizada."
"Buena formación en las materias de Humanidades y Teología, algo que es muy necesario hoy"
"Soy investigador del CSIC y siempre me han interesado los temas relacionados con el diálogo entre la Ciencia y la Religión, método científico y dimensión trascendente para abordar la compleja realidad del ser humano. Estos estudios me han dado muchas herramientas para articular las dimensiones de la persona que excluye por principio el método científico, he podido aprender elementos para valorarlas y para entender que estas dimensiones no pueden quedar al margen cuando se trata de comprender a la persona en su totalidad."
"Recomiendo mucho estudiar en el ISCREB. Te da una cultura religiosa impresionante, y conoces a personas fantásticas. Si se tiene interés por la religión cristiana, vale la pena estudiar Ciencias Religiosas."
Estos últimos años han salido a la luz miles de casos de pederastia producidos en el seno de la Iglesia. No ha sido una moda pasajera constatar estos pecados criminales cometidos, en muchos casos impunemente, por diferentes obispos, presbíteros, religiosos o laicos con responsabilidades en las comunidades cristianas. Este hecho doloroso nos invita a una reflexión teológica sobre la pregunta que muchos creyentes nos hacemos: ¿cómo es posible que no se hiciera nada?
El tiempo pasa de prisa aunque el desconfinamiento vaya poco a poco. Y, dado que este tiempo es propicio a la reflexión, podríamos preguntarnos? ¿Tiene sentido celebrar el día del Espíritu, Ruaj en hebreo, en tiempo de pandemia, cuando el futuro se nos presenta envuelto de negras sombras? Personalmente creo que sí y mucho.