Dr. Lluís Serra i Llansana
- Doctor en Psicología (URL)
- Licenciado en Teología (Pontificia Universidad Gregoriana de Roma)
- Licenciado en Filosofía (UB)
- Maestro
- Docente en la Facultad de Teología de Cataluña, en el ISCREB, al CEVRE y en Espailúdic
- Secretario de la Provincia marista L’Hermitage (Algeria, Catalunya, Francia, Grecia y Hungria)
- Ha realizado tareas directivas y docentes en la Universitat Ramon Llull y ha sido (2008-2020) secretario general de la URC (Unió de Religiosos de Catalunya) y director del CEVRE (Centre de Vida Religiosa i Espiritualitat)
- Columnista en Cataluña Cristiana y tertuliano en Radio Estel
- Blog en www.catalunyareligio.cat
- Autor de varios libros, entre los cuales "El eneagrama de las pasiones"
Dos preguntas existenciales
Viktor Frankl, en su obra El hombre en busca de sentido, se pregunta por el sentido de la vida. Afirma: «En realidad no importa que no esperemos nada de la vida, sino si la vida espera algo de nosotros. Tenemos que dejar de hacernos preguntas sobre el significado de
la vida y, en vez de ello, pensar en nosotros como en seres a quienes la vida les inquiriera continua e incesantemente».
El perdón
Con motivo de una conferencia en el Instituto Diocesano de Teología de Menorca (IDITEM) en Ciutadella sobre el tema del Jubileo 2025, Josep Pons Fraga, editor del diario Menorca, me formuló una serie de preguntas referidas especialmente al perdón, un tema recurrente en cada Jubileo. Las respuestas se publicaron en dicho diario el viernes 11 de octubre. Voy a compartir algunas.
Montserrat, sabiduría milenaria
El calendario señala el año 1025. El abat Oliba de Ripoll envía unos monjes de su cenobio para fundar un monasterio en la montaña de Montserrat. El día 8 de septiembre del 2024 se inicia la celebración del milenario de la comunidad benedictina que, de manera ininterrumpida, más allá de los vaivenes históricos, ha mantenido su presencia constante.
Cuando se visita el Sacro Speco de Subiaco en Italia, lugar realmente entrañable, se ve la estatua de san Benito con los brazos en alto conteniendo con su plegaria las rocas que pueden caer sobre el monasterio. La misma estatua podría estar en Montserrat con similar objetivo.
El viaje más largo
Tiempo de vacaciones, tiempo de viajes. Coches, autobuses, trenes, barcos, aviones… sirven para llegar al objetivo escogido. Con frecuencia, no se sabe bien si es más fuerte el atractivo por disfrutar de un destino nuevo que el deseo de marchar del escenario de la vida ordinaria. La distancia también tiene su importancia. Lo cercano es más conocido. Lo lejano lleva aparejado una mayor dosis de aventura. Dentro de nuestro planeta, las antípodas del lugar donde uno está son el punto más alejado posible, que ronda a una distancia de 20.000 kilómetros. Dos elementos básicos de los viajes, el tiempo y el espacio, al servicio de un propósito, de un porqué.
Crecimiento y vulnerabilidad
El Centre d'Art Amatller, situado en el Paseo de Gràcia de Barcelona, acoge una exposición singular titulada Sorolla, una nueva dimensión, en homenaje al pintor con motivo del centenario de su muerte, ocurrida el 10 de agosto 1923. La propuesta satisface, pese al escaso peso de obras exhibidas originales del autor, gracias a la experiencia inmersiva, que envuelve al espectador en una burbuja de imágenes. Momentos de contemplación para dejarse penetrar de la luz y del colorido mediterráneos que el autor plasma en sus cuadros. Hay otras ofertas que también gustan a los visitantes, pero ésta es la que más destaca.
El porqué de una visita
Los textos bíblicos, a menudo, son poliédricos. Admiten diversos niveles de profundidad y permiten ópticas diferentes y hermenéuticas diversas. La narración de Lucas correspondiente a la visita de Maria a Isabel (1,39-56), que incluye el canto del Magnificat, ha solido interpretarse en la mayoría de los autores como un acto de servicio y disponibilidad hacia su prima, que afrontaba la maternidad en edad avanzada. Sin negar esta interpretación, nos podemos aproximar al texto de otro modo, que encuentro más sugestivo.