Luces y sombras en la Iglesia
Estamos ante una obra que despierta interés, afecto y comprensión de la Iglesia en el momento actual, con sus luces y sombras y con sus retos de futuro que son los del mundo de hoy: la justicia social, el planeta tierra, las migraciones, la paz mundial, etc...
El autor, Andrea Ricardi, fundador de la Comunidad de Sant’Egidio y prestigioso historiador del mundo contemporáneo y de las religiones, reflexiona sobre la crisis del cristianismo hoy y a la vez que plantea una serie de cuestiones sobre la vitalidad y credibilidad de la Iglesia.
¿La Iglesia puede enfermar, puede morir? ¿La Iglesia está en crisis? ¿Puede desaparecer el cristianismo? ¿Cómo nos afectaría? ¿Cómo renovar las estructuras eclesiales actuales o hacer que nazcan nuevas? ¿En este largo invierno vocacional que estamos viviendo, nacerán brotes primaverales? Son preguntas que provocan a la fe y a la praxis cristiana.
El autor está convencido que la crisis no es el final, sino una oportunidad de purificación y de abrirse al futuro con nuevas energías, de renacer sin caer en la trampa de querer volver a épocas pasadas. Hay que mirar adelante y descubrir nuevos horizontes. La Iglesia está llamada a ser una pequeña luz y un signo de la misericordia y ternura de Dios. La acción solidaria, la investigación de la justicia, la fraternidad universal, el cuidado de la tierra son hitos indispensables en su misión evangelizadora.
El libro empieza con una imagen simbólica y significativa: el incendio de la Catedral de Notre Dame de París. A partir de este hecho dramático para la sociedad francesa y para los cristianos y personas de todo el mundo, más para la parte Occidental, se plantea una reflexión de carácter histórico y sociológico sobre la crisis en la Iglesia y en la sociedad contemporánea.
Esta situación no es solo un problema de los cristianos y de la Iglesia católica, se expande a otras confesiones religiosas y situaciones que vive la humanidad: “No hay nada seguro en la historia. Ni por la Iglesia. Los fieles creen en la institución divina (de la Iglesia) del fundador, pero viven la fragilidad y la precariedad de la historia” (pg. 24). Europa vive en una cultura del declive y en muchas comunidades cristianas e instituciones religiosas se respira aire de preocupación por el futuro.
El lector puede continuar leyendo sobre la situación de la Iglesia en Europa y los diferentes estilos de pontificados con S. Juan XXIII, S. Pablo VI, S. Juan Pablo II, Benedicto XVI y Papa Francisco. Cada cual con sus peculiaridades y estilos personales y según el momento histórico.
La pandemia ha marcado la vida de las personas y también de las religiones con normas que restringen el culto. De esta realidad también nos habla el libro y de cómo han surgido formas diferentes de culto que van de la presencia a la realidad virtual. Cierta preocupación, no exenta de interrogantes, por la celebración de la Eucaristía y los sacramentos que piden presencia.
El autor concluye su reflexión afirmando que un mundo cristiano en transición está naciendo y destaca como posibles causas los cambios culturales, la globalización, los movimientos migratorios y de refugiados, la crisis de valores que se da en nuestras sociedades industrializadas. A nivel de Iglesia católica, nos encontramos con acontecimientos que han puesto en cuestión la credibilidad del cristianismo y de la Iglesia. Surge la necesidad de identidad con los valores de la fe, el proyecto de Jesús, la comunidad cristiana, la ecología, la justicia, la fraternidad
La pregunta final que nos plantea el autor es si hay futuro. La respuesta, tal como nos sugiere “no está en una fórmula; es más bien una red de respuestas, historias y caminos por recorrer. Estamos ante una situación nueva respecto al s. XX: el mundo, al globalizarse, ha cambiado enormemente” (pg. 233).
La lectura de esta obra de Andrea Riccardi, que profundiza en la realidad cristiana y analiza con rigor las diferentes posibilidades de cómo salir de la situación de crisis que nos afecta a todos con mayor o menor medida, no nos dejará indiferentes.