El médico y profesor Jaume Duran, director gerente de la Fundación Sanitaria Mollet (FSM), habla en una entrevista en Sabadell TV, en el programa Parlem de Jaume Barbarà, sobre la transformación del Hospital de Mollet en un hospital verde.

Este es un proyecto que ha convertido este centro en una referencia de sostenibilidad a nivel catalán e internacional. El proyecto de Hospital Verd de Mollet ha sido reconocido con premios internacionales como el premio Plata en los Ashikaga-Nikken Excellence Award for Green Hospitals de la International Hospital Federation (IHF), y ha conseguido reducir las emisiones de CO₂ en un 71% en solo debe años, con el objetivo final de dejar la impronta de carbono a cero.

La apuesta por un hospital verde empezó hace unos años, coincidiendo con la construcción del nuevo edificio del Hospital de Mollet. Duran explica que este proyecto integral tiene en cuenta diferentes esos, desde la arquitectura sostenible del edificio hasta el uso de energías renovables y el reaprovechamiento de las aguas. La construcción bajo criterios de arquitectura sostenible ha permitido crear espacios ligeros y luminosos, reduciendo un 40% el consumo de luz en las consultas y espacios de pacientes. El agua de lluvia se reutiliza para regar los patios internos, plantados con árboles y plantas autóctonas, integrando el hospital en su entorno geográfico.

La sostenibilidad no solo se ha aplicado a las estructuras físicas, sino también a las maneras de trabajar y los procesos asistenciales. Uno de los grandes retos ha sido incorporar la cultura del reaprovechamiento y la gestión eficiente de los recursos en cada proceso asistencial. Duran destaca que la generación de residuos sólidos por paciente se reduce optimizando las estancias hospitalarias, fomentando la teleconsulta y agilizando los procesos médicos. La implicación del personal ha estado clave para este cambio cultural, con iniciativas como la creación de un parking para bicicletas y la facilitación del transporte público para el personal, así como la gestión de 29 tipos diferentes de residuos.

Duran subraya que sin la salud del planeta, no hay salud para las personas, y que los profesionales de la salud tienen un papel clave en la cura del medio ambiente. Argumenta que la sostenibilidad ambiental es esencial para la salud humana y que los factores medioambientales son determinantes de la salud, incluso más que las estructuras sanitarias o los factores genéticos y de estilo de vida. Esta conciencia se tiene que incorporar progresivamente en la práctica médica.

El sector sanitario es responsable de entre el 5% y el 10% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono, una paradoja para un sector que genera salud, pero también contribuye a la contaminación. Duran cree que hay que buscar energías más sostenibles y limpias, y que los profesionales de la salud tienen que ser parte de la solución. Esto implica mejoras en los procesos, como el uso adecuado de fármacos y diagnósticos, para garantizar la calidad de la atención y la seguridad de los pacientes, a la vez que se reduce el impacto ambiental.

La pandemia ha afectado la tendencia de reducción de residuos, puesto que ha requerido el uso de muy material desechable. Aun así, Duran insiste que la seguridad de los pacientes y de los profesionales es prioritaria, y que hay que minimizar el impacto ambiental tan pronto como sea posible. Finalmente, Duran afirma que siempre hay margen de mejora, independientemente de la edad de los edificios. Hay muchas políticas y procesos que se pueden implementar para mejorar la sostenibilidad, como la gestión eficiente de los residuos, el uso de energías sostenibles y la optimización de los procesos asistenciales, incluyendo la atención domiciliaria y la teleconsulta. Así, se puede reducir la necesidad de atención hospitalaria, contribuyendo en un planeta más saludable.

El Hospital de Mollet es un ejemplo inspirador de como los centros de salud pueden convertirse en actores clave en la lucha contra el cambio climático. La visión y liderazgo del Dr. Jaume Duran han demostrado que la sostenibilidad no solo es posible en el ámbito sanitario, sino que también puede mejorar la eficiencia y la calidad de la atención a los pacientes. El compromiso con la reducción de emisiones, la gestión eficiente de los recursos y la implicación de todo el personal reflejan un cambio cultural profundo que va más allá del hospital mismo. Como sociedad, podemos aprender mucho de este modelo integrador e innovador, que nos recuerda que la salud de las personas está indisolublemente ligada a la salud del planeta. En definitiva, el Hospital de Mollet nos muestra que, con determinación y creatividad, es posible hacer grandes pasos hacia un futuro más verde y saludable.